sábado, 3 de octubre de 2009

Dicotomía de la musa; cuerpo y mente.

Se ha ido la musa? Se habrá ido con las musarañas? Estará tras una muselina que la vela y la veda? o una verja verde con su pintura desconchada, que enseña la vergüenza de su óxido (su verdadera naturaleza) la mantiene recluida? Si es así, está a esa distancia frustrante que es 1 cm más que la longitud desde la punta del dedo al punto de dolor donde se te clava el hierro en la axila?
Que hay que hacer? Crecer? Esperar? Quedarse quieto mirando o correr para ver? Probablemente cambiar el registro para poder crecer esperando, esperar creciendo y sobre todo correr quieto... volar por el suelo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

por fin llego este día...aunq sólo pueda decirte: ¡¡FELICIDADES!! y no sólo por el día que es...tb por lo bien que sigues escribiendo... tu que puedes no lo dejes...

Un abrazo.